viernes, 5 de diciembre de 2014

Me rindo

Ha llegado el momento de sacar la cabeza de debajo de la tierra y afrontar el problema de la infertilidad.

Me rindo.

Por mucho que siga pensando que mi problema es hormonal y que los médicos no se molestan en solucionarlo porque prefieren mandarme a hacerme una in vitro y sacarse así un buen pellizco, me rindo.

Éste es mi último ciclo de relaciones programadas. El último ciclo de la fórmula mágica G+O+D.

Si esta vez vuelve a no funcionar, en cuanto pueda pasaré por quirófano y me dejaré hacer una laparoscopia (entiéndase lo de “dejarse hacer” no como un germanismo o anglicismo sino como mi rendición).

Y tengo miedo. Mucho miedo.

Nunca en mi vida me han operado de nada, ni me han puesto anestesia total. Nunca en mi vida he estado en un quirófano ni en la cama de un hospital.

Y sólo de pensarlo me entran ganas de llorar.

Tengo miedo de que algo salga mal y no vuelva a despertarme jamás, miedo de que me duela antes, durante o después de la operación, pero sobre todo, más que miedo, lo que siento es impotencia, vergüenza, frustración,

De saber que he perdido y que no tenía razón. Que nada ha funcionado por mucho que me haya dicho siempre que iba a demostrarles a los médicos que no tenían ni puta idea y que yo sabía que lo mío se arreglaba con unas pastillitas aquí y otras pastillitas allá.

De rendirme y de permitir que los médicos alemanes sigan haciendo negocio con los tratamientos innecesarios sin haber comprobado antes todo lo que se podría comprobar.

Y, de nuevo, miedo. Miedo de que los resultados de la laparoscopia no muestren lo que los médicos esperan y de nuevo se crucen de brazos y no sepan cómo proseguir.

Pero sobre todo, miedo de quedarme de nuevo sin ser madre.

3 comentarios:

  1. Mucho ánimo y un fuerte abrazo. Ya verás cómo va a ir todo bien.

    ResponderEliminar
  2. Te entiendo tanto...
    A mi me haran una laparoscopia en Enero, algo que pido desde hace un anyo porque tengo precedentes familiares de endometriosis aparte de claros sintomas, y no me la querian hacer, para hacer negocio con ya dos FIVs negativas. Asi que todo lo que has escrito yo tambien lo siento y solo decirte que seas fuerte, que tu puedes porque eres muy valiente. Piensa que si te ven algo, te lo podran quitar (o lo que hagan) y estaras mas cerca de ser madre. Y si no te ven nada, descartais otro motivo mas de infertilidad.
    No pierdas la esperanza !! Un abrazo muy fuerte.

    ResponderEliminar
  3. No lo piensen como que perdiste. Pensá que te vas a enriquecer. Que será una oportunidad. Nada se pierde, dicen, todo se transforma. Te lo dice alguien que tenía terror de entrar al quirófano. No tengas miedo de la anestesia. Te vas a despertar. Una laparoscopía es una intervención menor frente a otras cirugías. Ojalá que encuentren que todo está bien. Vas a estar bien. Pensá que van a volver a abrir el ombligo que es nuestra primera cicatriz. Tal vez sea necesario abrir y volver a cerrar. Muchos misterios se esconden en nuestro interior. Dejá que te ayuden. Ojalá que sí. Vas a ver que el miedo se va. No sé de dónde viene la fortaleza, supongo que del deseo enorme de ser mamá. Y eso ya lo tenés. Abrazo gigante.

    ResponderEliminar