lunes, 10 de marzo de 2014

Enttäuschung

Sí, decepción. Otra de tantas.

El viernes me levanté temprano, contenta y motivada, para hacerme el primer análisis que me han mandado en el Kinderwunschzentrum. Para que no tenga que hacerme cada vez los 60 km que separan mi ciudad de la ciudad en la que está el Kinderwunschzentrum, la Doctora T. me dijo que podía hacerme los análisis de sangre en la consulta de mi ginecóloga, en mi ciudad.

Dos veces antes de ir a la consulta llamé: una nada más volver del Kinderwunschzentrum y otra el día que me bajó la regla. En los dos casos les expuse mi caso y me dijeron que sin problemas, que fuera sin pedir cita el día que fuera necesario.

Y allá que me fui, como ya he dicho, contenta y motivada. Me hicieron esperar un rato en la sala de espera, cosa que me pareció rara porque no había nadie esperando para el Labor, pero bueno, tampoco es que me preocupara mucho tener que esperar porque era bastante pronto y tenía todo el día por delante. Por fin llegó una de las Helferinnen y me dijo que la Doctora B. quería hablar conmigo y que podía ya pasar. Me emocioné. Pensé: ”Qué guay, seguro que le ha sorprendido que me dieran cita en el Kinderwunschzentrum tan rápido y quiere preguntarme qué tal fue”.

¡Qué ilusa! Lo que me dijo, resumiendo, fue que ni de coña me iba a hacer ella los análisis en su consulta porque costaban un ojo de la cara y que ellos no tenían “Budget” para esas cosas. Que eso era cosa del Kinderwunschzentrum y que tenía que irme para allá inmediatamente si no quería perder el ciclo.

Se me saltaron las lágrimas de la rabia. Le pregunté que cómo era posible que después de haber llamado dos veces en diferentes semanas nadie me dijera que no era posible hacer los análisis ahí, que cómo era posible que siempre me dijera que me iba a ayudar en todo lo que pudiera y que justo la primera vez que la necesito me da ese plantón tan grande. Lo dicho, me faltó nada para ponerme a llorar. Pero no, ella no sólo no me consoló, sino que además no se le ocurrió otra cosa mejor que decirme que no podía venirme abajo por una Kleinigkeit así, ya que yo había decidido ser madre y el camino de la maternidad estaba lleno de obstáculos mucho peores que coger un tren y perder la mañana yendo a otra ciudad a hacerse los análisis.

No me sirvió de nada decirle lo que pensaba de todo eso, así que acabé cogiendo el tren, perdiendo la mañana y haciéndome los análisis en el Kinderwunschzentrum a 60 km de mi casa. Resultado: 4 horas entre unas cosas y otras para un pinchazo de menos de un minuto.

Eso sí, aunque todavía no me lo creo, fue el mejor pinchazo de mi vida. No noté absolutamente nada y cuando la Helferin me dijo que ya me podía levantar, pesé que la había entendido mal y que le que decía es que ya podía ir cerrando el puño.

Así que ya sabéis cómo va el tema aquí. Es posible que el Kinderwunschzentrum os ofrezca la posibilidad de haceros los análisis en la consulta de vuestro ginecólogo, es posible que llaméis a la consulta y que las chicas que os cojan el teléfono os digan que sí podéis hacer los análisis allí sin ningún problema, peeeero aquí la última palabra la tiene el mismo ginecólogo así que lo mejor es que pidáis hablar con el médico y que él os aclare si os los va a hacer o no. No vaya a ser que por fiaros de las chicas de la recepción perdáis el ciclo y no están las cosas (ni la paciencia) para estar regalando ciclos.

Yo tuve suerte porque ese día madrugué de casualidad y me planté en la consulta del ginecólogo bien pronto. Si me hubiera levantado dos horas más tarde… ¡No lo quiero ni pensar!

Ahora a esperar al día 13 del ciclo para que me hagan la ecografía y me digan los resultados del análisis. Parece que van a mirar los niveles de las principales hormonas (estrógenos, progesterona, LH, tiroides…) y mi reserva ovárica (AMH en alemán). ¡Qué nervios!

Y vosotras, ¿os habéis hecho ya este tipo de análisis? ¿qué tal salieron vuestros resultados?

2 comentarios:

  1. Hola!
    Acabo de descubrir tu blog y ya tienes una nueva seguidora :)
    Me siento identificada contigo porque yo también estoy en búsqueda de la cigüeña en Alemania, qué casualidad.
    Conozco lo que es llevarse decepciones mes tras mes y... bueno, que sepas que no estás sola y que estoy segura que pronto encontraremos a nuestras cigüeñas!!!!
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  2. ¡Muchísimas gracias por tu comentario! La verdad es que todavía no estoy segura de que esto de los blogs sea lo mío y recibir un mensaje como el tuyo me motiva mucho a seguir escribiendo.

    Siento mucho que estés en la misma situación que yo pero, como tú, yo también espero que la cigüeña venga pronto a hacernos una visita a las Alemanias. Mientras llega... ¡Mucho ánimo!

    ¡Un abrazo!

    ResponderEliminar